¿Cuánto necesita para jubilarse cómodamente en Ecuador vs. Estados Unidos?

En Estados Unidos se necesita un ahorro de al menos $1 millón para una jubilación cómoda. En Ecuador, aunque los costos son más bajos, la pensión promedio no alcanza. La siguiente comparación revela lo difícil que es vivir tranquilo después de los 65 en ambos países.
Durante décadas, jubilarse fue visto como una recompensa: la etapa del merecido descanso. Pero, en el mundo actual, esa idea se ha ido desdibujando. En Estados Unidos, la preocupación por llegar a la vejez con ahorros suficientes se ha vuelto creciente.
Y en Ecuador, aunque los costos de vida son más bajos, la situación no es menos preocupante: el dinero que entrega el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) no alcanza, y la mayoría no ahorra. Además, el sistema público de pensiones cada vez es más deficitario y necesita cada vez más subsidio estatal.
Estados Unidos: más de $1 millón en ahorros para vivir cómodamente el retiro
Un estudio reciente de GOBankingRates, uno de los medios más conocidos de educación financiera en EE.UU., trató de responder con cifras una pregunta que ronda millones de cabezas: ¿cuánto se necesita para jubilarse sin sobresaltos? La metodología fue clara: calcular cuánto cuesta vivir un año en cada estado del país y duplicar ese valor para asegurar una jubilación holgada. En Hawái, por ejemplo, el costo anual de vida alcanza los $186.000.
Según esa lógica, una persona que aspire a retirarse allí con tranquilidad, sin depender del Seguro Social, debería tener ahorrados al menos $3,7 millones. En el otro extremo está Virginia Occidental, donde los gastos anuales rondan los $64.000, y el ahorro sugerido apenas baja de $1,3 millones.
Estas cifras, que parecen de otro planeta para los países latinoamericanos, están respaldadas por una encuesta de Gallup que reveló un dato inquietante: solo el 50% de los estadounidenses no jubilados tiene una cuenta específica para ahorrar en sus “años dorados”. Muchos saben que lo que tienen no les alcanzará.
Ecuador: más de $260.000 en ahorros para tener un retiro cómodo
En Ecuador las cifras son más modestas. Pero eso no significa que el problema sea menor. Aquí, una jubilación “cómoda” no requiere millones, pero sí más de lo que la mayoría posee. Según plataformas como Numbeo, Expatistan y cifras contrastadas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), vivir con independencia y bienestar en ciudades como Quito, Guayaquil o Cuenca, requiere entre $1.100 y $1.300 mensuales como mínimo. Esto incluye alquiler, salud privada, transporte, alimentación saludable y algunos gustos básicos. Hablamos de entre $13.200 y $15.600 al año. Para 20 años de vida post laboral, un jubilado debería contar con al menos $260.000 a $320.000 en sus ahorros personales.
Pero esa meta es un espejismo para la mayoría de ecuatorianos. Según cifras del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), la pensión promedio que reciben los jubilados actualmente es de apenas $697,57 mensuales, un monto que no cubre ni siquiera los gastos mínimos de una vida independiente y sin apuros. Si a eso se suma que muchos jubilados aún deben pagar arriendo o enfrentar gastos médicos fuera del sistema público, el déficit mensual se vuelve crónico.
Lo más alarmante es que casi nadie ahorra para su vejez. Datos del Banco Mundial, a través del estudio Global Findex, revelan que solo el 11% de los adultos ecuatorianos guarda dinero específicamente para su jubilación. El resto —el 89%— depende completamente del IESS, de algún ingreso informal o del apoyo familiar.
Según la Superintendencia de Bancos y el Banco Central del Ecuador, solo el 36% de los ecuatorianos ahorra algo, y menos de un tercio lo hace a través de instituciones financieras formales. En la mayoría de los casos, esos ahorros no superan los $30 o $50 mensuales, y están pensados más para emergencias cotidianas que para un retiro a largo plazo.
Hay varias razones detrás de esta debilidad estructural. Primero, los ingresos en Ecuador son bajos y la informalidad afecta a más del 66% de la Población Económicamente Activa (PEA). Segundo, aún pesa el trauma del feriado bancario de 1999, que erosionó la confianza de la población en el sistema financiero. Tercero, la educación financiera es limitada: apenas el 27% de los adultos ecuatorianos entiende conceptos básicos de ahorro o inversión, según una encuesta regional de la CAF. Y cuarto, el país carece de un sistema de incentivos reales para fomentar el ahorro previsional voluntario.
En Ecuador o en Estados Unidos, una jubilación cómoda en privilegio de pocos
Así, aunque en teoría jubilarse en Ecuador puede costar entre 5 y 10 veces menos que en Estados Unidos, la gran diferencia está en la capacidad real de ahorro.
“En EE.UU., muchos saben que deben ahorrar y lo intentan, aunque no todos lo logran. En Ecuador, en cambio, la mayoría ni siquiera puede intentarlo. Llegar a los 65 años sin un fondo privado y con una pensión que apenas alcanza para lo básico es el escenario más probable para millones”, acotó Carla Robles, economista y consultora en finanzas personales.
El resultado es una paradoja, de acuerdo con Robles: jubilarse es más barato en Ecuador, sí, pero envejecer con tranquilidad sigue siendo un privilegio. Mientras en el norte se teme que el Seguro Social se agote, en el sur se teme no llegar a fin de mes. Y en ambos casos, el sueño del retiro sin angustias parece cada vez más lejano. (JS)
Fuente: La Hora