3,8 millones de afiliados sostienen a más de 7 millones de personas

En 2024, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) brindó servicios y beneficios a más de 7′198.000 personas en Ecuador, pero solo 3,8 millones fueron afiliados activos que aportan mensualmente.
El sistema de seguridad social ecuatoriano enfrenta una tensión estructural creciente. En 2024, 7,19 millones de personas recibieron servicios del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), pero solo 3,8 millones de ellas fueron afiliados activos que aportan mensualmente.
Entre los 7,19 millones de beneficiarios se incluye a 848.180 pensionistas y 2,5 millones de dependientes (cónyuges e hijos menores de edad), que acceden a prestaciones sin realizar aportes directos.
Esta relación de 2 personas cubiertas por cada afiliado activo evidencia el desequilibrio creciente, que compromete la sostenibilidad del sistema. La advertencia es clara: pocos sostienen los beneficios y servicios de muchos, en un modelo que necesita reformas urgentes para sobrevivir.
El presidente del Consejo Directivo del IESS, Édgar Lama, reconoció que hay una presión creciente sobre la institución, tanto financiera como operativa. Solo en 2024, el IESS desembolsó $6.343 millones en pensiones a jubilados, y para 2025 se proyecta que $6.900 millones del presupuesto total se destinen al pago de pensiones.
En concreto, más del 70% del presupuesto anual del IESS va a pagar pensiones. Un 22% se va al sistema de salud, pero no alcanza para todas las necesidades y servicios que se deben prestar.
El Estado debe subsidiar por ley el 40% de las pensiones, lo que representa más de $2.700 millones anuales en medio de un contexto fiscal precario y déficit que se ha disparado 17 veces en el último año. Todo esto se agrava por la deuda histórica de $27.389 millones que el Estado mantiene con el IESS.
El exministro de Economía, Fausto Ortiz, ha analizado que las transferencias al IESS están entre los gastos corrientes que más crecen y que cada vez son más insostenibles para el Estado ecuatoriano. “El subsidio del 40% al IESS por pensiones es claramente insostenible”, ha apuntado Ortiz.
¿Cómo se resolverá la crisis financiera del IESS?: No se tocarán la edad ni los aportes al IESS
Durante la rendición de cuentas sobre la gestión del IESS en el último año, tanto Lama como el director general del IESS, Francisco Abad, reafirmaron que la reforma de la seguridad social no incluirá cambios en la edad de jubilación ni en el porcentaje de aportes.
Actualmente, el sistema permite jubilarse desde los 60 años con 30 años de aportes o desde los 70 con apenas 10 años cotizados. La tasa de aportación es del 20,6% de la remuneración, dividida entre trabajador (9,45%) y empleador (11,15%).
De acuerdo con Lama, gran parte de la gestión se enfocará en el combate a la corrupción dentro del IESS. La Ley Orgánica de Integridad Pública, vigente desde el 26 de junio de 2025, eliminó la posibilidad de que los hospitales del IESS hagan compras directas de medicamentos e insumos. Ahora, las adquisiciones se harán bajo un modelo centralizado, con el fin de evitar negociaciones con proveedores no calificados.
“Vamos a tener que enfrentarnos a verdaderas redes criminales, pero vamos a salir triunfantes”, aseguró Lama, quien anticipó que pronto se revelará información sobre actos delictivos ocurridos en el hospital Teodoro Maldonado Carbo, en Guayaquil.
En medio de estas transformaciones, Lama insiste en que el IESS no puede seguir funcionando como hasta ahora: “Vamos a cambiar el modelo hospitalario, el sistema de compras, la gestión y el manejo del seguro social”.
El 2 de julio de 2025, la Confederación Nacional de Jubilados y Pensionistas de Montepío del Ecuador presentó cinco demandas concretas al IESS:
1. Aumentar las pensiones más bajas para cubrir el costo de la canasta básica ($812,64 según el INEC).
2. Impulsar una reforma integral a la Ley de Seguridad Social.
3. Reducir la burocracia del IESS y del Banco del IESS (Biess).
4. Mejorar la calidad y cobertura de la atención médica. LA HORA ha publicado que Ecuador está entre los países de América Latina que menos invierte en salud, y que la presión de gasto se triplicará en 2050.
5. Exigir al Estado el pago de su deuda con la institución.
A esto sumaron una solicitud para participar en las mesas técnicas que definirán la reforma del sistema de seguridad social. Lama confirmó que los jubilados serán incluidos, aunque las mesas aún no se han instalado. Se espera que empiecen dentro de tres meses, según lo dicho por el presidente del Consejo Directivo del IESS, con una planificación que evite el uso político del proceso.
Asimismo, Lama también se mostró abierto a evaluar el tema de la mejora o aumento de las pensiones de los jubilados que menos reciben.
Sin embargo, advirtió que esto “no significa, necesariamente, que serán implementadas”, pues toda propuesta debe evaluarse en función de la salud financiera del sistema.
Las autoridades del IESS aseguran que la reforma al sistema de seguridad social podría estar lista este 2025, pero los tiempos son cortos y los desafíos económicos se acumulan.
“Si se cumple lo planeado, las mesas técnicas iniciarían a mediados de octubre de 2025. En el mejor de los casos, un proyecto de reforma podría quedar a finales de noviembre o en diciembre. En ese último trimestre de 2025, el Gobierno tiene que presentar el presupuesto para 2026 y una nueva reforma tributaria. Se ve complicado el panorama”, explicó Andrés Rodríguez, economista. (JS)
Fuente: La Hora





